Pocas veces acontecen recitales de ésta índole. Por una parte, llenos de anécdotas y, por otra, con errores de gran factura que hicieron pender de un hilo el concierto de los norteamericanos, para finalmente lograr salir adelante con una jornada algo accidentada, pero con un cierre final más que exitoso. Hablamos de la primera vez en Chile, de la banda oriunda de Seattle, Queensrÿche, quiénes luego de tres intentos fallidos (o más incluso) de venir a nuestro país, por fin pudieron hacerse presentes en ésta angosta faja de tierra, y dejar en claro porque son considerados como uno de los grupos más influyentes del Metal Progresivo mundial.
Como todo recital en día Domingo, la jornada daría inicio temprano y de forma puntual, y así fue. Con el reloj indicando minutos pasados de las siete de la tarde, y un Teatro Teletón con gente muy agolpada en el sector que fue destinado a Platea y con muy poca gente en la parte de cancha, las luces del recinto capitalino se apagaron para dar paso fulminante al show de los gringos, solo quedando los focos encendidos en dirección al escenario que nos indicaban que debíamos dirigir nuestra atención al plató central, del que salieron al ritmo de los primeros acordes de Best I Can, los cinco músicos que se encargarían de dar vida a la velada, Scott Rockenfield en batería, Eddie Jackson en el bajo, Mike Stone y Wilton en Guitarras, y finalmente un elegantísimo Geoff Tate, que lucía su terno característico de cada show en vivo, demostrando desde los primeros instantes que su agudo y potente vozarrón, seguía más que vigente.
No alcanzaba a sonar el último riff de Best I Can, cuando un repentino apagón de los samplers de teclado, evidenciaba que algo no andaba bien del todo, y con una despedida y un mensaje de “ya volveremos” por parte de Tate, se vino una espera a luces apagadas de más de 20 minutos, que por lo menos sirvió para que llegara más gente a la vacía cancha que de a poco fue rellenándose más. Así y todo la espera no sirvió para solucionar el problema con el secuenciador, y como nunca sucede, la banda tuvo que cambiar el setlist, y dejar fuera de la velada cualquier canción que hiciera uso de samplers, situación bastante desventajosa en cierta forma, pero que al mismo tiempo nos hizo disfrutar de clasicazos que no se tocaron en ningún otro país de la gira Sudamericana.
De esta forma la velada continuó con N M 156, canción de su primer larga duración, The Warning, para seguir con dos temas de la segunda parte de Operation Mindcrime, Hostage y The Hands, interpretadas muy fielmente al disco y dando paso al primer break y discurso de la noche por parte del dicharachero vocalista, quién hizo alusión a todos aquellos que se excusan por todo, añadiendo que en su tierra dichos personajes eran conocidos como losers y explicando que la canción que seguía estaba dedicada a un perdedor, y así sonó la bellísima Bridge, abriendo la calma en el Teatro Teletón, que con un dejo de melancolía y fuerza (sonidos más que característiscos de los temas mid-tempo de los Rÿche), daría el respiro necesario para continuar con la increíble Another Rainy Night (Without You), canción que generó extasis en los presentes y que fue una de las primeras en las que se vió al público respondiendo con fuerza al coro cantado por el magistral, Geoff Tate, quién no desteñía ni las notas más altas.
Nuevamente volveríamos a los ’80, pero esta vez con Walk In The Shadows, temón de Rage For Order, única canción que tocarían de esta placa, que fue quizás la principal afectada con la falta de samplers, ya que comparado con los cuatro o cinco temas que figuraban en los setlists de sus pasadas presentaciones en Brasil o México, en el Teatro Teletón sólo pudimos presenciar éste corte del disco en cuestión. Posterior a esto, nuevamente se vendría otro de los “Speech” de Tate, pero en esta ocasión nos hizo viajar a la “edad de piedra” de Queensrÿche, -tal como él señaló- a sus inicios, cuando escuchaban conjuntos como Black Sabbath, que los inspiraron e influenciaron con su música, a tal punto de lanzar el recién pasado año un disco en exclusiva de sólo covers de sus bandas favoritas, y del cual esta noche interpretaron la mítica Neon Knights que prendió al respetable con la fuerza avasalladora de un clásico de tamaña envergadura.
La jornada continuaría con Last Time In Paris (del OST de The Adventures of Ford Farlaine), un tema bastante entretenido (pero que así y todo, fue quizás el punto más discreto de la noche), en el que el carismático vocalista demostró que es todo un showman en escena, y que no basta sólo con cantar, pues durante toda la velada dejó en claro sus dotes histriónicos y actorales, que seguirían haciendo furor en el siguiente bloque del recital, lejos la parte más emocionante y prendida de toda la velada.
Pues mientras afuera del recinto capitalino un temporal de viento azotaba Santiago, dentro del Teatro Teletón vivíamos una lluvia continua y tupida de clásicos de Operation Mindcrime, tales como Breaking The Silence, la increíble, I Don’t Believe In Love, y, la más que inesperada y sorpresiva, The Needle Lies, momento que se salió de todo lo presupuestado, haciendo de Chile el único país afortunado de disfrutar de dichas canciones en vivo. Volveríamos rápidamente a Empire con Jet City Woman, mientras el escenario se tornaba de un fuerte color esmeralda, y el público en extasis coreaba a todo pulmón para luego, sin salir de la sorpresa y catarsis musical, continuar con Eyes Of A Stranger, canción que cierra Operation Mindcrime, y que puso el broche a uno de los puntos más altos del recital.
Bajaríamos las revoluciones con The Lady Wore Black, corte de su primer EP homónimo del ’83 (del que se extrañó bastante un temazo como lo es Queen of the Reich), pero sólo un poco, ya que volveríamos a The Warning, para finalizar el show con la potente y clásica Take Hold Of The Flame, despidiendo de ésta forma una velada más que memorable, con un Tate que se robó la noche. Con un Queensrÿche más que elegante y profesional, con demostraciones de un virtuosismo y sonido más que vigente, y con un quinteto que supo salir adelante a pesar de los problemas técnicos, omitiendo más de algún clásico, pero al mismo tiempo brindándonos otros inesperados y exclusivos.
Fue así como las luces del recinto se encendían nuevamente en conjunto de la música ambiental y los rockeros de Seattle dejaban las tablas, mientras el público empezaba a hacer abandono del lugar, indicando que el final a una jornada algo corta pero más que memorable había llegado.
Fueron años de espera y por lo mismo quiero finalizar este review con unas palabras al respecto de… ¡Un momento! ¡Esto no se acabó ahí señores! Pues increíblemente, y como nunca sucede (a estas alturas supongo que les quedará claro que fue una noche de sucesos inesperados), gran parte del público no se fue y persistieron ahí por, quizás, veinte minutos, o más, gritando, llamando a la banda constantemente. Y dentro de nuestra curiosidad por saber el desenlace de ésto permanecimos en el teatro, a diferencia de mucha gente que sin fé se retiraba del recinto. Pero el premio fue finalmente para los que creyeron y los que aguantaron hasta las últimas instancias, pues dentro de todos los movimientos que se veía que hacía el tour manager, y los encargados de producción, el milagro finalmente ocurrió y tuvieron que reconectar ambas guitarras, haciendo que el regreso de Tate, Wilton y Stone fuera inminente, y a modo casi acústico y fogatero, interpretaran la increíble Silent Lucidity. La misma balada que los lanzó a la fama y por la que son reconocidos hasta por los menos conocedores de la carrera de Queensrÿche.
Sucedió lo imposible, y nos retirábamos más que contentos. Quizás el setlist fue algo corto, pero por lo accidentado y atípico de la presentación de los de Seattle, fue una noche llena de anécdotas para contar y todos sentimos que fue un show más que intenso, dejando a gran parte de los presentes más que satisfechos, y dando un balance positivo a un concierto más que memorable, dentro de los que van del año.
Review: Nicolás Pérez.
Fotos: Sandra González.
Setlist:
1. Best I Can
2. NM 156
3. Hostage
4. The Hands
5. Bridge
6. Another Rainy Night (Without You)
7. Walk In The Shadows
8. Neon Knights (Black Sabbath Cover)
9. Last Time In Paris
10. Breaking The Silence
11. I Don’t Believe In Love
12. The Needle Lies
13. Jet City Woman
14. Eyes Of A Stranger
15. The Lady Wore Black
16. Take Hold On The Flame
17. Silent Lucidity
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